Historia General del Pueblo Dominicano Tomo VI

502 Movimientos sociales y estructuras de poder Somerford, su agregado laboral, para que ejercieran influencia en el nuevo organismo. Estos agentes sobornaban a los líderes sindicales y denunciaban como comunistas a los que no estaban dispuestos a colaborar. Este fue el caso de Miguel Soto, el secretario general de Foupsa (1961-1965) y diputado del PRD quien, en 1961, no estuvo dispuesto a aceptar un soborno de 30,000 dólares para que no convocara una huelga. Como no pudieron controlar a Foupsa, decidieron retirarse y formaron el Bloque Foupsa Libre el 11 de fe- brero de 1962, el cual adoptaría el nombre de Confederación Dominicana de Trabajadores Libres (Conatral). 8 Foupsa quedó en manos de los dirigentes del PRD, pero con una fuerte incidencia de sectores de izquierda. En este contexto aparecieron otras centrales sindicales que tendrían una incidencia considerable en la vida laboral. Entre estas se destaca la Confederación Autónoma de Sindicatos Cristianos (CASC), creada en fe- brero de 1962 y afiliada a la Confederación Latinoamericana de Sindicatos Cristianos (Clasc) y, a nivel nacional, dependiente del Partido Revolucionario Social Cristiano (PRSC). Al igual que el Foupsa, la CASC aceptaba miembros de diversos partidos, pero el comité ejecutivo estaba constituido por miem- bros del PRSC. Ese mismo año grupos de izquierda fundaron la Unión de Trabajadores Sindicalizados, conocida como La Unión. Esta agrupación era la más progresista, pero su incidencia en el ambiente era limitada. Grupos ligados al PRD formaron la Confederación Sindical de Trabajadores Dominicanos (Cesitrado) en octubre de 1962, pero luego la integraron a Foupsa, pasando así a formar Foupsa-Cesitrado. Durante este período también surgieron la Federación Nacional de Empleados Públicos e Instituciones Autónomos (Fenepia), que agrupaba a los empleados públicos y la Federación Nacional de Maestros (Fenama). En ambas centrales se po- día notar la presencia de cuadros del PRD y de izquierda. Entre todas estas organizaciones sindicales cabe resaltar la militancia de dos organizaciones cuya combatividad por los derechos de los trabajadores hizo historia en la vida sindical dominicana: el Sindicato de Obreros Portuarios de Arrimo (Poasi), que agrupaba a los trabajadores portuarios, y el Sindicato Unido de La Romana, uno de los más combativos en el sector azucarero. Si bien es cierto que la izquierda tuvo cierta influencia en ambos sindicatos, estos mantuvieron una gran autonomía con respecto a los partidos políticos, lo cual les permitió consolidarse y resistir eficientemente los embates de la represión. El resto de las centrales sindicales eran directamente controladas por los partidos políticos dominantes convirtiéndolas en correa de transmi- sión de sus intereses.

RkJQdWJsaXNoZXIy MzI0Njc3