Historia General del Pueblo Dominicano Tomo VI
Historia general del pueblo dominicano 493 en la tónica de la difícil recomposición del modelo de dominación neopatrimonialista en una sociedad con un mercado a la vez más expuesto a los choques externos y más orientado a la inserción en la economía global que se estaba gestando en esos momentos. 7 Como lo expresa el sociólogo, escritor y estudioso de la literatura, José Alcántara Almánzar: «Hay obras de Balaguer que hablan de su amor por los grandes monumentos y figuras históricas, como su Guía emocional de la Ciudad Románica (1944), en la que sub- yace […] su admiración por la figura paradigmática de frey Nicolás de Ovando, el fiero conquistador que convirtió en realidad la ciudad amurallada en la margen occidental del río Ozama. Ovando, constructor y pacificador, compendia el ideal de gobernante que Balaguer emula: un mandatario que erige ciudades al mismo tiempo que impone el orden con mano férrea, enfrentándose a sus adversarios con una gélida e impasible actitud», «Reflejos de Joaquín Balaguer, el escritor», El Caribe , 23 de julio de 2002. 8 Según el historiador Frank Moya Pons, Balaguer volvió a la presidencia de la República con la intención de no abandonarla por el resto de su vida, y el único escollo que sentía tener por delante era el expresidente Jorque Blanco, quien contaba con un poderoso gru- po económico y político de apoyo y tenía las mayores posibilidades de enfrentarlo en las elecciones de 1990. «Para evitar el retorno de Jorge Blanco al poder, Balaguer gastó la mayor parte de su primer año de gobierno tratando de destruir cualquier residuo de prestigio o influencia que Jorge Blanco hubiese podido conservar», Manual de historia dominicana , Santo Domingo, 2002, pp. 568-570. 9 Ibíd., pp. 571-572. 10 Con el término «espiral del silencio» la politóloga alemana Elizabeth Noëlle-Neumann designó la tendencia que opera en los procesos de formación de opinión pública a sumir en el silencio la opinión minoritaria a favor del predominio de la opinión de la mayoría, fundamentada esta tendencia en el temor del ser humano a ser aislado del grupo. En este sentido, en el clima de la espiral del silencio, aquellos que opinan diferente a la mayoría tienen dos opciones: o sumarse a la opinión mayoritaria, o callar su opinión para no correr el riesgo de quedar aislados. Esta teoría fue formulada en La espiral del silencio. Opinión pública: nuestra piel social , Barcelona, 1995. 11 Lo que llamamos neoliberalismo supone la preeminencia del mercado como regulador de las relaciones sociales y como marco de limitación y definición de las políticas públi- cas. Supone un ideal de individuo que orienta sus relaciones por criterios de efectividad, costo y maximización de utilidades. En términos de las políticas públicas de carácter económico que se desarrollaron bajo su invocación, figuraron las de privatización de las empresas estatales, el levantamiento unilateral de las barreras económicas, la aboli- ción de los subsidios al consumidor, la expulsión del Estado de la microeconomía y el estímulo a la afluencia de capital extranjero en todas sus formas. El neoliberalismo fue impulsado por los principales organismos multilaterales —FMI, Banco Mundial, Banco Interamericano de Desarrollo—, y fue el discurso con el que se legitimó el proceso de ajus- te estructural en América Latina y en el resto del mundo subdesarrollado. Ver Osvaldo Sunkel, «En busca del desarrollo perdido», en Repensar la teoría del desarrollo en un contexto de globalización . Homenaje a Celso Furtado. Gregorio Vidal y Arturo Guillén R. (comps.), enero de 2007; y Alejandro Portes, «El neoliberalismo y la sociología del desarrollo: tendencias emergentes y efectos inesperados», Perfiles Latinoamericanos , Año 7, No. 13 (diciembre de 1998).
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