Historia General del Pueblo Dominicano Tomo VI
Historia general del pueblo dominicano 485 Con todo y eso, a Peña Gómez y sus asesores les costó mucho esfuerzo convencer a la opinión pública, porque los rivales del PRD orquestaron una imponente campaña en los medios con el objetivo de demostrar que Peña Gómez había «inventado» el fraude. Pero al final, Peña Gómez y su partido pudieron demostrar claramente que «[…] el padrón electoral limpio, distri- buido de manera oficial a todos los partidos políticos con gran antelación a las elecciones y según lo establecido por ley, era completamente diferente a la lista fraudulenta que fue plantada por la JCE en las mesas de votación el día de las elecciones». 37 Ante la presión internacional y nacional y ante la fuerza de las evidencias, la Junta Central Electoral decidió conformar una «Comisión de Verificación», compuesta principalmente por expertos en procesamiento de datos. El 16 de julio de 1994, la comisión reportó lo siguiente: «Los padrones de electores enviados por la Junta Central Electoral a los centros de votación para la reali- zación de las elecciones generales no coinciden con los padrones de electores enviados a los partidos políticos. Se informa al menos que 45 municipios se han visto afectados. La Comisión Verificadora recibió quejas de más de 1,900 centros de votación. Asimismo evaluó no menos de 1,468 centros de voto con un promedio de 20 sustitutos por centro de votación. Concluye que de acuer- do a la información recogida, al menos 45,000 votantes fueron privados de su derecho a votar y, no menos de 29,672, de acuerdo a la información evaluada (Junta Central Electoral 1994, 31-32)». 38 En conclusión, de las 1,900 mesas electorales analizadas, por lo menos 1,468 habían sido afectadas por algún tipo de irregularidad. Pero los políti- cos reformistas y aliados de Balaguer se valieron del argumento de que estas evidencias no probaban intencionalidad por parte de alguien de manipular a su favor el proceso, debido a que el informe era un tanto vago con respecto a preguntas tales como: a) ¿En qué medida estas irregularidades afectaron los resultados electorales?; b) ¿Cuál fue el número total de nombres reem- plazados a nivel nacional; y c) ¿Cómo se realizó el cambio de nombre y quién lo hizo? No obstante, hay estudiosos, como Emelio Betances, que afirman que las evidencias son suficientes para demostrar que se había concretado un golpe de Estado electoral: «El dictamen de la comisión dejó en claro que las irre- gularidades cometidas en el proceso electoral podrían haber modificado los resultados de la elección a nivel presidencial, legislativo y municipal. A pesar de estas conclusiones, la JCE declaró vencedor a Balaguer en las elecciones de 1994. Balaguer y sus aliados obtuvieron el 42.3 % de los votos; Peña Gómez y sus aliados obtuvieron el 41.6 %; Bosch y sus aliados, el 13 por ciento, y
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