Historia General del Pueblo Dominicano Tomo VI

Historia general del pueblo dominicano 481 quinta vez a Juan Bosch como su candidato presidencial. Fue elegido como candidato a vicepresidente Leonel Fernández, un joven abogado y profesor universitario que había vivido una gran parte de su infancia y juventud en los Estados Unidos, y que había hecho una carrera notable dentro del partido. Gracias a su formación intelectual, su capacidad retórica como comunicador y su sagacidad como político, logró sustraerse a las sordas luchas entre las tendencias de su partido y ganar la confianza. Hubo también rutinas de reorganización en el Partido Revolucionario Dominicano (PRD), el cual por fin se recuperó de las graves fragmentaciones ya comentadas. El PRD pasó a ser liderado de manera casi absoluta por el Dr. José Francisco Peña Gómez, quien ahora pasaba a ser el candidato presiden- cial. Habida cuenta de la fuerte tradición de conformar coaliciones partidarias para obtener el triunfo electoral, Peña Gómez se aproximó por igual a partidos de izquierda y derecha. Se manifestaba así la despolarización ideológica en la política dominicana, por los efectos del término de la Guerra Fría y la crisis de los socialismos reales en Europa, fenómeno que se evidenció en el cambio de discurso de Juan Bosch en el proceso electoral de 1990. De esa manera, el PRD formó una alianza con cinco partidos a la que se dio el nombre de Acuerdo de Santo Domingo. Peña Gómez escogió a Fernando Álvarez Bogaert, políti- co procedente del Partido Reformista y excandidato a la vicepresidencia con Joaquín Balaguer en 1978, como su compañero de boleta. Además de la afi- nidad política que en ese momento se produjo entre Álvarez Bogaert y Peña Gómez y de proceder de la misma provincia (Valverde), había una historia de afecto y amistad personal entre ambos. Por suparte, Balaguer eligió como compañero de boleta a Jacinto Peynado, un joven y próspero empresario, miembro de una familia de abolengo, nieto de un expresidente de la República en tiempos de Trujillo, y bisnieto de un general de la Restauración. Peynado, que siempre mostró una habilidad nota- ble en articular fuerzas en efectivos frentes partidistas, armó una coalición de ocho partidos políticos. En 1992 existían fuertes presiones por parte de muchas de las principa- les fuerzas de la sociedad civil y política para que se garantizaran comicios limpios después del proceso electoral de 1990, el cual fue considerado o abiertamente fraudulento o por lo menos plagado por irregularidades que le habían restado legitimidad y credibilidad. En respuesta a esa situación, el gobierno del Dr. Joaquín Balaguer promovió una reforma de la ley electoral (Ley 8-92) y la elaboración de un nuevo Registro Electoral en 1993, con el fin de garantizar un proceso más transparente y limpio en 1994. La nueva ley amplió el número de jueces electorales de tres a cinco, asignó mayor monto

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