Historia General del Pueblo Dominicano Tomo VI

Historia general del pueblo dominicano 461 primer año de gobierno de Joaquín Balaguer, y el expresidente fue sumido en el acorralamiento por las autoridades de justicia y la banca de abogados a cargo de las demandas en su contra. Jorge Blanco cayó en un casi completo desamparo por parte de las fuerzas de la opinión pública, las cuales, ya fuera por la impresión dominante de que su culpabilidad y la de su equipo eran obvias, o ya fuera por temor a navegar contra la corriente, facilitaron por obra u omisión las acciones del Gobierno contra el expresidente. El 29 de abril de 1987, Jorge Blanco se vio obligado a presentarse ante una jueza de instrucción que lo interrogó por unas diez horas, y a seguidas dictó una orden de prisión inmediata. El expresidente trató de evadir esa medida intentando asilarse en la embajada de Venezuela. El plan culminó en fracaso, tanto por la renuencia de las autoridades venezolanas a comprometerse con él por razones de política interna, como por la opinión expresada por líderes del PRD ante el gobierno venezolano, de que la acusación contra Jorge Blanco no era un caso de persecución política. 9 Entre esa fecha y el día en que, aquejado por problemas cardíacos, tuvo que acogerse a su salida negociada hacia un hos- pital de los Estados Unidos, comprometiéndose a volver al país para someterse a la justicia, el prestigio, el liderazgo y las posibilidades de Jorge Blanco poder repetir como candidato presidencial del PRD fueron hechos añicos. Lo que en la actualidad se podría calificar como persecución nunca fue reconocido como tal por las autoridades, quienes definieron el proceso como un asunto puramente legal, y que desde el punto de vista del más imparcial de los observadores, el procesamiento de Jorge Blanco contó con la aproba- ción de la mayor parte de la opinión pública, imbuida por un ánimo de indig- nación popular contra lo que fue percibido como excesiva corrupción de su administración. Las autoridades judiciales de entonces sometieron a muchos de los exfuncionarios de su administración, algunos de los cuales fueron enviados a prisión sin juicio previo, algo muy común en las prácticas de la justicia de en- tonces. Tales irregularidades jurídicas no levantaron objeciones significativas, salvo, entre pocas, las del influyente periodista y editorialista Rafael Herrera, director del periódico Listín Diario , como si se estuviera componiendo un caso casi puro de la ley de la «espiral del silencio». 10 Con una oposición política anulada, al PRD le tomaría el resto del perío- do gubernamental para recomponerse de la derrota de 1986 y la cura de las heridas abiertas por la división y el enfrentamiento entre los grupos de Jorge Blanco y de Jacobo Majluta hasta el final del período; el PLD no emergería como la mayor fuerza electoral opositora. En consecuencia, Joaquín Balaguer tenía el terreno libre para instrumentar su política económica, la cual no