Historia General del Pueblo Dominicano Tomo VI
Historia general del pueblo dominicano 399 mercado paralelo, y se decidió otorgar incentivos cambiarios a las exportacio- nes y traspasar algunas al mercado paralelo. La devaluación de la moneda, a través de la «unificación de los diferentes tipos de cambio entonces vigentes en uno más realista», era el objetivo principal del acuerdo con el FMI, 29 y así era explícitado en la Carta de Intención de enero de 1983. 30 Entre agosto de 1982 y septiembre de 1983, la Junta Monetaria tomó una serie de medidas 31 dirigidas a liberalizar el mercado cambiario y a crear una nueva institucionalidad. Para alcanzar estos dos objetivos se fue amplian- do el mercado paralelo de divisas, el cual suplía, en 1983, cerca de un 60 % de las importaciones; 32 se amplió la participación de los bancos comerciales en ese mercado y se procuró la regulación de las casas de cambios sobre las cuales no había ningún tipo de control. La nueva institucionalidad del mercado cambia- rio se justificaba «[...] en el hecho de que a medida que se ampliaba cada día más el volumen de operaciones de ese mercado y se restringía la esfera de acción de la paridad oficial y a sabiendas de que el objetivo final era que la totalidad de las operaciones reflejaran el tipo de cambio del mercado libre, era necesario institucionalizar, legalizar y supervisar a los intermediarios que se dedicaban a la compra y venta de divisas en ese mercado». 33 Este acuerdo se aplicó con cierta normalidad hasta el tercer trimestre de 1983, cuando sus efectos se hicieron sentir en la población y en los sectores productivos. Las tensiones fueron creciendo debido a la reducción de salarios decretada desde el mismo inicio del Gobierno, la contracción del crédito y el alza de precios de los servicios públicos y de un conjunto de bienes cuyos precios habían estado controlados por el Gobierno. El nivel de protestas de la ciudadanía fue creciendo; los paros se multiplicaron, tanto a nivel de las provincias, por demandas de infraestructura, como a nivel sectorial, 34 en la medida en que los sectores productivos empezaron a sentir el efecto de la contracción y perdieron la confianza en la política económica. Las contradic- ciones al interior del PRD y las críticas a la política económica se hicieron cada vez más notorias, en particular las dirigidas contra el Banco Central, lo cual se extendió hasta los propios funcionarios del Gobierno. 35 El Gobierno había seguido una táctica errada. Primero ocultó sus ob- jetivos y medidas de política económica para el ajuste, aunque las mismas ya estaban definidas desde la transición y estaban en el programa de go- bierno; y después se dedicó a criticar públicamente las medidas de ajuste adoptadas, denunciándolas como una imposición del FMI. Es más, entre agosto y diciembre de 1982 se argumentó la necesidad de adelantar las me- didas para que cuando llegara el acuerdo con el FMI, en enero, se hubiera pasado lo peor.
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